Elena subió las escaleras hacia la planta alta de la
casa, abrió la puerta de la recámara de su hermano, vió que estaba dormido,
recogió los pantalones que él había dejado en el piso y los puso sobre el
respaldo del sillón, se acercó a él, le dio un beso en la frente y salió de la
recámara dejando la puerta abierta, entró a su recámara y se terminó de
desnudar, ya su novio se había encargado de quitarle el sostén, la panty y las
medias para hacer el amor de forma apasionada, entró al baño y dejó su panty
sobre el piso de la regadera, la había usado para cubrir su vagina y así evitar
que el semen de su novio escurriera y manchara el sofá de la sala, mañana la
lavaría al bañarse, se puso su camisón y se tendió sobre la cama y pensó "Ya
tengo 21 años, sé tomar mis decisiones, además soy una lujuriosa, me encanta
tenerlo dentro de mi, lo tiene grande... y en que forma me llena de semen, me
desbordo… mmm lo adoro"
Estaba cansada, se habían despertado a las 4 de la
mañana para llevar a sus papás al aeropuerto, recordaba las escenas en la fría
sala de espera para abordar. "Se portan bien niños, tú Luis obedece en todo a
tu hermana que es la mayor"… "Si mamá"… "Tienen dinero suficiente para toda la
semana, no hay que pagar nada que no sea comida y si hay necesidad sacas del
cajero o pagas con la tarjeta Elena y si necesitan de un adulto hablan a la
comandancia de la región con el teniente coronel Ramírez que me prometió estar
al pendiente de ustedes"…"Si mamá, ya no te preocupes y diviértanse en su
segunda luna de miel". Su papá con voz seria le había dicho "Ven hija",
la apartó de su hermano y su mamá para decirle.
-Por favor Elena, mucho cuidado con tú
novio, no lo quiero en la casa hasta altas horas de la noche, respeta la
casa y sabes a que me refiero"…
-¿Cómo crees papá?, ¡Claro que la respeto!, además él
se va de vacaciones en la semana santa…
-Bueno, confío en ti, no me vayas a salir con
alguna tontería
Rió pensando en que su papá nunca se enteraría de que
en su propia sala había tenido un sexo increíble con su novio. "Que se lo
diga a mi hermano que tiene 17 años, yo ya soy mayor de edad y no puede evitar
que me acueste con el hombre que amo y que pronto será mi esposo". Sin
embargo sabía que si su papá se enteraba sería el término de su noviazgo, lo que
su padre tenía de amoroso y comprensivo lo tenía de recto, estricto y
disciplinado, no por nada sobre su uniforme militar brillaban esas tres
estrellas, para él su familia y su casa eran sagradas y exigía total respeto
hacia ellas. "No le temblaría el pulso para darle a mi novio un muy fuerte
escarmiento… y a mi no lo quiero ni pensar"
Mientras pensaba en la reacción de su padre si se
enteraba y recordaba el delicioso sexo que había tenido se quedó profundamente
dormida.
Por la mañana se levantó bajó a la cocina y encontró a
su hermano preparando su desayuno.
-Buenos días Luis, ¿quieres que te lo prepare yo?
-No
-Nos quedamos solos por una semana, ¿quieres hacer algo
en especial? También estamos de vacaciones
-No, no quiero hacer nada.
-Caray, que mal genio, ¿Estas molesto por que no te
llevaron?, era su segunda luna de miel chaparro, tienen derecho de tomarse una
semana solos, tal vez nos den otro hermanito.
-¡Qué estúpida!
-De verdad que amaneciste insoportable.
Luis tomó su desayuno y se sentó en la mesa de la
cocina, Elena comenzó a preparar el suyo y le dijo a su hermano
-Anoche habló mi papá, estaban en Nueva York y hoy
toman el crucero, habló como a las doce de la noche.
-Si lo sé, me despertó el teléfono. Pensé en bajar,
pero estabas ocupada en "otras cosas". Y no me pude dormir hasta las tres de la
mañana.
-¿Qué otras cosas?, ¿A qué te refieres?, además yo
entré a tu recámara y estabas dormido.
-Me hice el dormido, recogiste mi ropa, me diste un
beso en la frente, traías tu ropa interior y tus medias en la mano, tu minifalda
toda arrugada y la blusa abierta, debo decir que tienes unos pechos hermosos.
-¡Estabas soñando!, ¿Por qué habría de llevar la blusa
abierta?
Elena puso su desayuno en su plato, se sentó en la mesa
frente a su hermano y comenzó a comer. Su hermano la miró sonriendo y dijo
-Que rico coges Elena, eres una real hembra, me
encantas, aprietas delicioso… Si amor, ven, ven, lléname de tu leche ardiente
dámela toda, toda… mmm que delicia.
-¡Luis!, ¡Cállate la boca!, ¡Eres un imbécil!
Luis se levantó en silencio y cuando salía de la cocina
Elena le dijo.
-Es mi novio, lo amo, yo le gusto y él me gusta, ¿Nunca
has sentido ese deseo sexual por alguien?
Luis regresó a sentarse junto a su hermana y
respondió
-Le debes de gustar, la verdad estás más buena que el
pan hermanita… Claro que he tenido deseos sexuales y anoche me los enardeciste,
pero ya ves, ni siquiera he podido acariciarte, ni a ninguna otra mujer.
-¿Qué viste Luis?...respóndeme como hombre.
-¡Como hombre?... Muy bien, te vi con la blusa abierta
mientras él mamaba tus tetas grandes y redondas, el color de la piel de tus
lindas piernas resaltaba con lo negro de tus medias conforme él te las quitaba,
quitó tu panty y se puso a lamerte ahí, lo tienes depilado, rosita, rico. Tú le
bajaste el pantalón y te pusiste a mamarle la verga, la saboreabas como loca,
después el te clavo su verga en la vagina, te hizo gemir y se comenzaron a mover
los dos hasta que te viniste y después él se dio una venidota dentro de ti… Te
cogió rico el cabrón, te disfrutó como loco y es lógico, a una mujer como tú
yo……
-¡Luis, no sigas hablando! y no seas tan explícito que
te puedo entender con otras palabras
-Tú me retaste a decirlo y yo digo lo que pude ver,
cuando subiste a mi cuarto yo me acababa de masturbar pensando en que yo era tu
novio.
-¡Por favor no digas eso, soy tu hermana!
-¿Y en quien podía pensar, en la madre Teresa?, la
mujer que vi cogiendo y que me excitó al máximo eras tú, ¿A que otra me podría
imaginar debajo de mi disfrutando del sexo?
-¡Ya Luis!, no es correcto que platiquemos de estas
cosas tú y yo, somos hermanos y tú eres menor de edad, mejor olvidémoslo, no sea
que después nos arrepintamos.
-¿De nuestras palabras o de qué?, ¿De cuando me
espiabas mientras me bañaba?, ¿De cuando acercabas tus nalgas a mi verga para
hacer que se parara?... ¿Ya se te olvidó?...Claro viviendo de aquí para allá,
sin tiempo para hacer amigos o novios, yo era lo único a la mano para… para… En
fin, tú ya tienes quien te "riegue tu jardín" y te olvidaste de lo mucho que
buscabas a tu hermanito, que si no fuera porqué nunca habíamos estado solos, de
seguro……
Elena lo miró en silencio, Luis se levanto de la mesa,
salió de la cocina y subió a su recámara, mientras ella se quedaba en la cocina
recogiendo los platos y metiéndolos en el lava-vajillas, estaba preocupada.
Terminó de recoger la cocina y subió a la recámara de su hermano, él estaba
dentro del baño, escuchó el ruido del agua de la regadera, le recogería su
recámara, tenía que tratarlo bien, hacerle sus cosas para que sintiera que
estaba dispuesta a servirle con tal de que no platicara lo que había visto, al
hacer a un lado las cobijas de la cama bajo de ellas estaba el póster que habían
mandado hacer de una foto.
Ella tenía uno igual en su recámara, en el se veía a
ella en bikini abrazada de su hermano, la habían tomado el año pasado cuando
estaban en ese paraíso que era Bora-Bora. Se quedó observándolo y recordando el
lugar, se miró en la foto, "La verdad tengo buen cuerpo" se dijo y en ese
momento pensó "¿Porqué lo habrá descolgado de la pared?", la respuesta le
llegó como un rayo hiriente "Se masturbó viendo mi foto, era verdad lo que
dijo", miró a la cama y observó unos pañuelos desechables usados sobre de
ella. Abrió despacio el cajón de su mesita de noche y vió unas revistas de
mujeres desnudas, "Si tiene estas revistas ¿Por qué la foto de su
hermana? Dejó el póster nuevamente bajo las cobijas y salió del cuarto con
un raro sentimiento dentro de ella
Mientras estaba en su cuarto escuchó la voz de su
hermano "Elena, voy a salir", "llévate uno de los autos, las llaves
están en la cocina", respondió Elena, él abrió la puerta de la recamara de
su hermana y la encontró en tanga y sostén, los dos se quedaron mirando por unos
momentos, ella no soportó la mirada de su hermano recorriendo su cuerpo y le
dijo "Por Dios Luis, ¿No puedes llamar a la puerta?" el sonrió
diciendo "Y el cabrón de tu novio ¿A qué puerta llama?"… "¡Luis!" gritó
Elena y él dijo "OK, me voy, pero no pienso usar ningún auto, no caeré en tu
juego de hacerme violar las normas del general y tener los dos algo que
ocultar, te equivocas hermanita" Cuando Luis salía Elena le gritó "Tú te
lo pierdes, podías ir en auto"… "Soy menor de edad hermanita, no tengo
permiso para conducir, a menos que a mi lado vaya el general" ,Y se retiro
riendo.
Elena quedó pensativa en la forma en que la había
mirado su hermano, su relación era muy estrecha pero no al grado de sentirse
atraídos uno por el otro, "¿O si?", se preguntó sentándose sobre su cama,
"Hemos estado tan solos él y yo, de una ciudad a otra incluso al extranjero
donde ni el idioma conocíamos, nuestros amigos son tan pocos, llegamos a estar
en Alemania solo por tres meses".…Volteo hacia el póster que tenía en
la pared y le dijo "No te culpo hermanito, yo llegué a desearte, eras el
único hombre con el que podía desahogar eso que me quemaba por dentro, si, si lo
hice". Se vistió escribió una nota para su hermano y salió en su auto a casa
de una amiga.
Regresó a casa a las 8 de la noche, su hermano estaba
viendo la TV en el hall de la planta alta, subió con unas bolsas de frituras,
las puso sobre la mesa frente a él diciendo "Tu sube los refrescos, me
voy a dar un baño ¿Dónde comiste?"…"Aquí en la casa, vi tu nota diciéndome que
no vendrías hasta en la noche y me preparé unos emparedados, yo esperaba que me
hicieras algo delicioso pero no estabas en casa"… "¿Algo delicioso para
comer?"… "Al menos", respondió Luis, ella rió, entró a su recámara, y se
metió al baño.
Terminando de bañarse se puso crema en el cuerpo, su
panty y un camisón corto a medio muslo, caminó descalza a sentarse junto a su
hermano que preguntó "¿Ya te piensas dormir?", ella respondió "No,
solo que ya no pienso salir, al rato cenamos y nos vamos a acostar, ¿te
parece?"... "Sería bueno", respondió Luis, Elena quedó en silencio viendo
como su hermano no quitaba la vista de sus piernas, sintió vergüenza paro
también un raro sentimiento, se sentía deseada y su natural sensualidad y
coquetería vencían su pudor, se puso de pie y nuevamente se sentó en el sofá,
está vez de lado sobre su pantorrilla haciendo que su camisón se subiera y su
rodilla se juntara al muslo de su hermano. Luis sin separar la vista de las
piernas de ella la cuestionó
-Te vestiste muy cachonda ¿Va a venir el cabrón de tú
novio?
-Luis, ¿Qué traes en contra de mi novio?, entiende que
es normal que dos personas que se aman sientan deseos y los realicen, ¡por
Dios!, que nunca me lo perdonarás, ¿Y el día que me case?, voy a coger con él
todos los días y me va a embarazar y formaremos una familia, ¿Lo vas a odiar por
eso?
-¿Qué traigo contra él?... No sé... estaré celoso o le
tendré mucha envidia
Elena se quedó en silencio mirando a los ojos a su
hermano, ¿realmente la deseaba? o tal vez sentía esa urgencia de experimentar y
con la única mujer con la que sentía la confianza de hacerlo era con ella. La
actitud de su hermano la ponía nerviosa mas sin embargo lo comprendía, ella
misma lo había hecho con él, roces, abrazos, caricias y besos muy cercanos a los
labios, ella también había estado deseosa, lo había espiado mientras se bañaba,
lo había visto bajo la regadera acariciando su pene erecto hasta que arrojó su
semen. Esa vez ella regreso a tirarse boca arriba sobre su cama, puso una
almohada sobre su cuerpo y con sus dedos había desahogado su excitación pensando
en su propio hermano.
Sabía que muchos inician sus experiencias entre primos,
pero ellos poco conocían a sus primos, su vida había sido viajar al lado de sus
padres sufriendo en carne propia el rigor de la vida militar, "hoy aquí, mañana
quien sabe"… Hasta hacía poco tiempo su padre había comprado esa casa y decidido
que ahí radicara su familia, si lo mandaban a otro lugar se iría solo. Dos años
tenían radicando en ese lugar, para ella había sido mas fácil hacer amigos,
enamorarse y tener novio, ella era mujer, a ella la buscaban los amigos, pero su
hermano viviendo ese nacer explosivo de la sexualidad, del deseo incontrolable y
sin muchas amistades por ser tan introvertido, la estaba pasando difícil.
-¿De que se trata Luis?___ Preguntó Elena
-¿De que se trata qué?
-Todo esto, me miras de una manera y me hablas de una
forma que ya no sé que pensar…Hay chicas que quisieran estar contigo, incluso yo
he visto que Monserrat la doctora del batallón te mira con ojos de deseo, le
gustas, podrías probar suerte con ella y sacar todo ese deseo que traes dentro.
Ella es dos años mayor que yo, acaba de terminar su carrera de médico y aún en
uniforme se ve que tiene un buen cuerpo. Es mas te lo diré claramente, Monse es
mi amiga y me ha dicho que le atraes mucho, si yo fuera tú probaría suerte antes
de que la cambien de plaza, ya ves que duran muy poco en un lugar.
-¿Me estás diciendo que una mayor del ejercito quiere
coger conmigo?... ¡Ja!.. A no ser por que soy el hijo de su general comandante
no entiendo la razón, se lo diría a mi papá pensando que eso lo compromete con
ella.
-¿No crees que te pueda desear alguna chica?
-¡No!, ninguna se presta a hacer nada conmigo, no sé
como acariciarlas, no sé que hacer para besarlas… ¿Quién quiere a un pendejo así
en la cama? y mejor cállate, no quiero hablar de eso que me deprimo.
Elena subió su pie sobre los muslos de su hermano, él
le tomó el pie, le dio un besó y rápidamente lo bajó, ella lo miró y le
dijo.
-Así no, toma mi pierna, acaríciala y bésala despacio,
trata de disfrutar de lo que haces.
El miró a su hermana a los ojos, puso sus manos bajo la
pantorrilla de ella y la subió hacia su boca, la besó delicadamente, la apoyó
sobre su mejilla mientras la acariciaba diciendo "Qué suave piel,
huele delicioso, me gustas". Pasó su mano por la rodilla, acarició el
principio del muslo de su hermana fijando la vista en el triángulo blanco que su
panty formaba en la entrepierna. Bajó su mano acariciando el muslo y Elena no le
permitió llegar a donde él quería, retiró su pierna y bajó los pies al piso
diciendo, "¿Ves que es fácil?". Luis respondió, "No, no lo es, ni
contigo que sé que me quieres, soy un inexperto y no tengo idea de lo que se
debe hacer" Elena dijo "Luis, te quiero mucho, eres muy guapo, si
no fueras mi hermano ya te tendría en mi cama metida entre tus brazos, en esto
no te puedo ayudar chaparro"
-Enséñame como besar a una mujer.
-¿Y como terminaría Luis?…somos hermanos, vivimos bajo
el mismo techo, ¿Qué quieres?, ¿Qué durmamos juntos?, ¿Qué le diríamos a
nuestros padres?...Luis y yo nos amamos mucho y decidimos compartir la cama,
pueden alquilar una recámara o utilícenla de bodega… ¡¡Por Dios hermano!!
Quedaron unos minutos en silencio, ambos miraban la
pantalla de la TV si saber que había en ella, solo esperaban que el otro dijera
la primera palabra para responder y fué Elena la que rompió el silencio.
-¿Qué quieres aprender?, ¿Un beso apasionado?... OK,
eso te lo enseño ¡y nada mas!, acércate, junta tu boca a la mía, con los labios
separados y al juntar nuestros labios, sacas tu lengua y la metes en mi boca
para buscar la mía, saborea mi lengua, mezcla tu saliva con la mía y disfruta de
su calor y humedad… ¿Entiendes?...Acércate.
Acercaron sus bocas entreabiertas y juntaron sus
lenguas saboreándose mutuamente por un buen rato, Elena se separó lentamente,
miró a su hermano a los ojos, bajó la vista y observó su enorme erección bajo el
pantalón, estaba realmente grande y ella comenzaba a sentir la humedad en su
vagina, dijo "Hasta ahí Luis, nada mas", el se acomodó el pene metiendo
su mano bajo el pantalón y le dijo "Mira como me dejaste, ¿me quedo
así?¿Ardiendo de deseos por ti?", ella puso sus manos sobre los
muslos de su hermano, "Luis, no me hagas sentir la villana del
cuento", él en respuesta la abrazó y metió su mano por debajo del camisón,
acariciándole los muslos y la cintura mientras acercaba nuevamente su boca a la
de ella quien respondió separando sus labios para unirse nuevamente en un
apasionado beso, cuando ella sintió la mano de su hermano subir hacia sus
pechos, se separó y le dijo.
-No Luis, mejor lo dejamos, ¿Quieres terminar en la
cama con tu hermana?, ¿Penetrar su cuerpo y llenarla con tu semen?, Por favor
dejémoslo así.
-¿Y que te podría pasar?, supongo que te cuidas para
recibir el semen de tu novio, además tú también lo deseas y no lo puedes
negar.
-Si… quiero decir que no, que no puede ser, te quiero y
siempre hemos estado muy solos por varios años, de aquí para allá, ciudades
nuevas, escuelas nuevas, costumbres nuevas…En esas noches de excitación me daban
ganas de correr a tu recámara y sentir…Eras muy niño aún, pero….
-Pero al tener ya un novio que te complace sexualmente
se te olvidó que yo también estoy solo y que mi único desahogo es masturbarme
viendo tu fotografía.
Respondió Luis acariciando los muslos de Elena, él
estaba dispuesto a todo y ella ardía en deseos, no solo por sentir el placer
sexual sino que también quería complacer a su hermano, a su compañero de
soledad, al chico con el cual había llorado en cada cambio de casa, "Otra vez
hermano, un lugar nuevo y a la soledad de no conocer a nadie, ya me cansé de
tener que olvidar amigos y cariños, ya me cansé hermano", le había
dicho entre llantos y él, su hermano menor la abrazaba diciendo "Me tienes a
mi hermana, tú a mi y yo a ti, no es mucho, pero es algo". Sus padres
nunca los habían dejado solos en casa hasta esta vez en que la libertad de hacer
había desbordado sin control los sentimientos del uno hacia el otro,
confundiéndose el amor, la soledad, el deseo y la necesidad. "Tengo que
solucionarlo de alguna manera" pensó Elena, tomó las manos de su hermano que
acariciaban sus muslos y mirándolo a los ojos le dijo.
-Luis, estás ardiendo, el deseo no te deja pensar en
las consecuencias que podría tener si terminamos haciéndolo, necesitas
desahogarte, me voy a poner de pie frente a ti, me voy a desnudar y tú te vas a
masturbar mirándome como si fuera mi foto, es más te dejaré tocarme las piernas
mientras lo haces, pero no podemos terminar cogiendo hermano, eso sería un
incesto.
-¿Y lo que propones no lo es?
-¡Ya no sé!___Gritó Elena con llanto en los ojos___Pero
es esto o un duchazo de agua fría los dos.
-Quiero verte y tocarte, te deseo Elena, ¿no lo puedes
entender?, quiero que seas la primera mujer en mi vida, siempre lo he deseado,
sueño que beso todo tu cuerpo, sueño que te hago sentir un orgasmo delicioso,
sueño que me vengo dentro de ti y terminamos felices de tenernos uno al otro
Elena se puso de pie, doblaba sus rodillas y ponía sus
manos entre ellas llevada por el nerviosismo, el llanto brotaba de sus ojos,
movía sus pies pateando sobre el piso y decía.
-Cállate Luis, ya cállate y dime si aceptas lo que te
propongo o me voy a meter bajo la regadera de agua fría, no me lleves a hacer lo
que no debemos hacer….
-¿Y tú?
-Olvídate de mí, yo sabré como desahogarme, tú solo
mastúrbate viéndome y terminemos con esto que ya no lo resisto más, voy a
terminar loca Luis… Te lo suplico.
-Está bien,
desnúdate.
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Sexo Entre Hermanos
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